Esplendoroso, sería el calificativo con el que quedaría descrito a la perfección el Domingo de Ramos. Aunque aún hay cosas que mejorar en diversos aspectos (y la Junta de Gobierno trabajará en ello), toda la jornada transcurrió como en el imaginario de cada uno de los hermanos de nuestra Hermandad se deseaba, sol y temperaturas primaverales -aunque en determinadas horas fuesen más bien veraniegas-.
Este año, la cuadrilla de costaleras cumplía su XX aniversario, y se homenajeó a dos personas que aún continúan desde el inicio de la cuadrilla, doña Montemayor Domínguez Cordero como costalera y don Antonio Verano Morales como capataz, a quienes se les entregó un cuadro conmemorativo.
La primera levantá del paso de misterio se le ofreció a doña Montemayor Domínguez Cordero, como homenaje a todas las mujeres que han pertenecido a la cuadrilla de costaleras de la Hermandad desde 1.994, y la primera levantá del paso de palio a nuestra pregonera, doña Rosario Paniagua Fernández. Y así concluía la mañana del Domingo de Ramos para nuestra Hermandad.
A las seis de la tarde se abrían las puertas de nuestro templo para iniciar su caminar la Cruz de Guía. La principal novedad este año ha sido adelantar una hora el horario de recogida, al suprimirse del itinerario las calles Tres de Agosto y Divina Pastora, lo cual visto los comentarios y opiniones, así como el cortejo y el discurrir de la cofradía, ha sido todo un éxito.
En referencia al discurrir de la cofradía, destacar el ritmo de paso de la misma, así como ver estampas inéditas hasta la fecha -era la primera vez que se pasaba por Carrera Oficial casi con la luz solar-. Todo transcurrió según lo previsto, cumpliéndose los horarios estipulados, y destacando el arropamiento de público a partir de las Hermanas de la Cruz y hasta la entrada de la cofradía de nuevo en la iglesia de San Francisco, en la que entraba el palio a las 23,15 horas.